Ayer
encontraba esta noticia por casualidad:
Grandes
libros que jamás se convertirán en películas.
La
adaptación de obras literarias ha sido, es y será uno
de los principales recursos de
la industria cinematográfica para encontrar nuevas películas que
producir. Sin embargo, hay libros magníficos que nunca verás
trasladados a la gran
pantalla. Por
unas razones o por otras, no parece posible convertirlos en
filmes sin traicionar parcial o completamente su esencia.
Podéis
leer la noticia completa aquí:
Y nada más
leerla pensé: "pues mejor"... fue un pensamiento
espontáneo... sin más... Después continué leyendo el artículo
donde se detallaban las 5 grandes obras que no son posibles
llevar a las salas del cine, porque nadie sería capaz de imaginar
diversas escenas entre refrescos y palomitas.
Confieso
que no soy nada cinéfila, pero es que la mayor parte de las veces
que he leído un libro y después he visto la película o la serie,
la decepción ha sido mayúscula... y os aseguro que tengo una larga
lista...
Sólo
mencionaré una... "El tiempo entre costuras"... de María Dueñas...
El libro es una delicia y la serie una sosez... Entiendo que quizás
así llegue a un amplio público, entiendo que los medios de
comunicación se hagan eco de los altos niveles de audiencia, de lo
fantásticos que son los actores que las protagonizan... el mercado
manda y mueve mucho dinero... Lo entiendo... Pero a mí me roban la
magia, invaden mis espacios, me hacen trizas la imaginación, me
parten a los personajes, quitan, pegan y ponen con total impunidad y
siento que han transformado la obra original (aunque sea con
supervisión del autor), siento que me venden otra obra diferente...
y puestos a elegir me quedo con la mía, con la y que yo iba tejiendo
mientras leía el libro, saboreando cada escena, cada personaje, cada
diálogo... poniendo mis voces y mis caras... El tiempo entre
costuras ni siquiera terminé de verla... Y lo visto traté de
olvidarlo leyendo de nuevo mi obra, la que está en mi estantería y
la que me proporcionó tantos momentos mágicos.
Así que
por mi parte, sólo puedo decir que benditas las obras que no pueden ser llevadas a la gran pantalla.
¡¡¡¡Feliz
viernes!!!!
Hola. cuando empecé a leer tu post pensé lo mismo que tu.. pues mejor... las películas se cargan los argumentos de los libros... Tampoco suelo ir mucho al cine y las veces que vi una peli inspirada en un libro me defraudó. Hay muchos guionistas en el mundo... que hagan los guiones originales para crear las películas... seguimos en contacto
ResponderEliminar¡¡¡¡Me alegro de compartir opinión Marta!!!!
ResponderEliminarSiempre me he sentido un poco bicho raro con este tema.
Un beso.