¿Qué ha sucedido en el mundo para que los mismos que provocaron una crisis gigantesca, en lugar de pagar por lo que hicieron, hayan terminado sometiendo a los gobiernos y obligándoles a que tomen las decisiones que les convienen?
Este libro ofrece una visión sobre lo que ha pasado: desde la difusión de las hipotecas basura hasta la explosión de la deuda que ha vuelto a poner a los pueblos de rodillas ante el poder financiero.
Estos tiempos de crisis nos están "sirviendo" para adquirir una formación económico/financiera que seguramente muchos ni nos habríamos planteado en otras circunstancias.
ResponderEliminarEstoy leyendo este libro y dice cosas muy interesantes... y a la vez preocupantes. Yo os recomiendo también el artículo sobre los mercados financieros y la especulación que podéis encontrar en el enlace:
http://www.attac.es/que-son-los-mercados-financieros-y-la-especulacion-financiera/
En las páginas 121-122 viene la siguiente reflexión que pienso resumelo que he leído hasta ahora del libro y me parece un análisis muy acertado sobre la "crisis" que nos está tocando vivir:
ResponderEliminar[...] la sociedad se ha olvidado de que el fin de la economía es el de encontrar un sistema válido para producir, distribuir y consumir, que logre asegurar un nivel de vida digno a todos los ciudadanos y les permita satisfacer sus necesidades e incrementar su bienestar. En cambio, la sociedad parece caminar en sentido contrario al indicado.
En aras de un crecimiento económico que además es depredador del sistema natural en el que se arraiga, y a pesar de los extraordinarios avances técnicos logrados en las últimas décadas, los ciudadanos cada vez viven en peores condiciones en todas partes del mundo. La disminución de los salarios, la precariedad e inestabilidad del trabajo, el estrés que resulta de vivir permanentemente amenazado por el despido y la competencia en todos los ámbitos, el acceso cada vez más complicado a bienes de primera necesidad como la alimentación o la vivienda e incluso el peor y más caro acceso a la educación y la sanidad demuestran que la sociedad ha equivocado radicalmente el rumbo. Ha pensado la vida para subordinarla al sistema económico, cuando en realidad es el sistema económico el que debería estar subordinado a la vida misma. [...]
¡¡¡Gracias por tus comentarios y aportaciones!!!
ResponderEliminarUn beso.
Un dato más para le reflexión (pags. 144-149) ¿de dónde salió el dinero?:
ResponderEliminar[...] Una de las cuestiones que más llama la atención de los ciudadanos normales es de dónde ha salido y de dónde están saliendo los cientos y cientos de miles de millones de dólares que los bancos centrales y el tesoro norteamericano están poniendo a disposición de los bancos.
La pregunta es pertinente porque realmente sorprende la magnitud del apoyo que se destina a los ya de por sí más ricos del mundo. Y sorprende, sobre todo, si se compara con otras necesidades para las que nunca parece que haya dinero.
Según las Naciones Unidas cada día que pasa mueren alrededor de 5.000 niños por falta de agua limpia, cuando lo que se necesitaría para dar agua potable a todo el planeta serían 32.000 millones de dólares (además de frenar la avaricia criminal de algunas de las grandes multinacionales, claro está). En el mundo había al finalizar 2009 1.020 millones de personas que pasan hambre y quizá otros tantas severamente desnutridas, y para acabar con ese drama la FAO afirma que serían necesarios otros 30.000 millones de dólares. Es decir, que para que nadie en el mundo muriera de hambre o de sed, sólo sería necesario más o menos el 40% de lo que el Banco Central Europeo inyectó en los mercados solo el 29 de septiembre de 2008. [...]